martes, 20 de abril de 2010

Es en el camino al cielo donde perdemos lo que deberíamos encontrar

Me distraje con la luna mientras buscaba mirarte. Iba caminando despacio para no perder de vista la forma en que te movés pero la luna estaba más tímida y brillante que nunca; yo me distraje porque ella se escondía entre las nubes y no quería que se fuera.

Quería seguir mirándote pero ya no estabas. Escuché tus pasos perderse entre la noche y supe que ya no estabas; ahí supe que no volvías.

Será que son esos momentos de distracción los que desarman nuestra vida sin que nos demos cuenta; que por mirar para otro lado, o por querer llegar al cielo sólo mirando, nos perdemos de vista con quienes deberíamos estar mirándonos.

sábado, 17 de abril de 2010

Podés


o enamorarte y aceptar las consencuencias.
Saber que te vas a volver un poco estúpida, vas a sufrir, te vas a reir, vas a llorar, vas a ser feliz, te vas a pelear y arreglarte de vuelta, vas a salir a tomar un helado, vas a quedarte en tu casa a ver una película, te vas a poner celosa, él se va a poner celoso de tus amigos, te van a besar, vas a abrazar, vas a llorar, vas a reir y te vas a despeinar (como dice la publicidad); pero te vas a enamorar, por sobre todas las cosas y sin restricciones, con pleno convencimiento de ello.

o no permitirte enamorarte y perderte de todo eso, aunque también implique llorar un poco.

... como si las cosas lindas de la vida no necesitasen esfuerzo para poder alcanzarlas.

lunes, 12 de abril de 2010

Caminar saltando (si se puede)


Quizás quieras buscar en el fondo del cajón las sonrisas que tenías cuando todavía no te habían roto el corazón y, cuando el mundo te lo pida, salir a la calle cantando con la felicidad que canta un niño. Casi nadie puede decir que no le rompieron el corazón, así que todos podemos buscar en el cajón y salir un día a caminar saltando.

Yo supongo que hay algunos cajones que no tienen fondo o que se rompieron y las sonrisas desaparecieron. Supongo que el mío es uno de esos y que las pesadillas aparecen en en el momento que no puedo encontrar ese "antes" que hace la diferencia cuando estás mal; por eso me despierto con dolor de cabeza y el resto del día casi no puedo existir.

no me salió salir a la calle a caminar saltando porque las sonrisas están tan al fondo que no llego.